domingo, 22 de febrero de 2009

El efecto de dormir mal puede confundirse con depresión.


EM., VyS., 20-02-09.

La mala interpretación de problemas derivados del sueño hace que personas reciban tratamientos que no necesitan.

"Se está tratando a algunos niños con medicamentos como el Ritalin, cuando lo que tienen es un trastorno del sueño", advierte Mark Kohler, del Hospital para Mujeres y Niños de Adelaida (Australia).

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Dormir mal y poco puede causar desórdenes psiquiátricos o, incluso, puede inducir comportamientos que los médicos confunden con una enfermedad mental que requiere de tratamiento.

Ésta es la conclusión de un trabajo que publica la revista New Scientist y que destaca que esta mala interpretación de los problemas derivados de no dormir bien hace que miles de personas estén recibiendo tratamientos farmacológicos que no sólo no les ayudan, sino que podrían estar empeorando su condición.

El psicólogo Matt Walker, de la Universidad de Berkeley, en California, considera "muy preocupante" que un importante porcentaje de personas que sólo sufren trastornos del sueño estén siendo tratadas como si tuvieran una enfermedad psiquiátrica.

El estudio da la vuelta a la conclusión compartida por la mayoría de los psiquiatras de que las personas con enfermedades mentales duermen mal y que es un síntoma más del problema, antes que una causa.

"Es fácil decir que es normal que un paciente depresivo o con esquizofrenia no duerma bien y no preguntarse si hay una relación causal en sentido contrario", coincide Robert Stickgold, experto de la Unidad del Sueño de la Universidad de Harvard.

Stickgold afirma que aunque ha habido investigaciones que ofrecen datos para pensar que los malos hábitos de sueño son un factor favorecedor de los trastornos mentales, la línea general de la psiquiatría tendía a no tenerlos en cuenta.

Abuso de fármacos.

Algunos estudios plantean que el insomnio predispone a desarrollar un proceso depresivo.

Dormir mal también puede explicar otros comportamientos característicos asociados a otras enfermedades mentales como los episodios maniacos que sufren las personas con trastorno bipolar o las que presentan problemas de déficit atencional.

Es la falta de sueño lo que provoca los problemas, y no al revés. La explicación física es que el sueño interrumpido dispara los niveles de estrés hormonal y que esto causa ansiedad durante el día, pero lo que los científicos se preguntan es por qué también reduce la capacidad del cerebro para procesar emociones y para reaccionar de manera adecuada a diversos estímulos.

La preocupación de los médicos que defienden esta línea es que se está abusando del uso de fármacos para tratar a gente que sólo necesita dormir más o mejor, incluidos los menores de edad.

Un monumento a la ineptitud.


Entre el 6 y el 8 de enero pasado, tras hacer cumbre en el Aconcagua, la mayor cumbre de América (6.959 metros), cuatro deportistas italianos, bajo la guía del argentino Federido Campanini, fueron sorprendidos por una tormenta y se perdieron.

Después de pasar dos días a 25 grados bajo cero, la ayuda llegó, pero Elena Senin, de 38 años, ya había muerto.

El rescate, que movilizó a más de 50 personas, casi todas voluntarias, demandó localizar a los sobrevivientes, llevarlos nuevamente a la cumbre y descender por la ruta original. Eso salvó a los tres italianos pero fracasó para el guía, Federico Campanini, de 31 años, quien falleció el 9 de enero a metros de la cima del Aconcagua.

El miércoles 18 de febrero pasado, la red sorprendió con imágenes de ese rescate, que muestran cómo Campanini es arrastrado por la nieve e insultado por rescatistas.

“El I Ching, un libro de sabiduría chino, dice que ante el peligro el cobarde se precipita y que el valiente no. Y que la escuela es entrenar y poner al frente todos nuestros miedos”.

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EM., deportes, 21-02-08.
Monumento a la ineptitud.
Por Mauricio Purto.

Así tituló el vespertino "La Segunda" una entrevista en que di la opinión sobre las crudas imágenes que dan cuenta de la incapacidad, desesperación y desaciertos de unos rescatistas argentinos, y del maltrato recibido por el andinista, también argentino, Federico Campanini, en sus últimos minutos de vida durante una operación de rescate en el Aconcagua, luego que el montañista y un grupo de excursionistas italianos fueran sorprendidos por una tormenta de nieve.

El video de dos minutos subido a YouTube muestra a Campanini exhausto, pero consciente, mientras es jalado por una cuerda y es arrastrado por la nieve. Campanini intenta avanzar gateando... Desfallece, se yergue y es increpado por sus posibles salvadores, en una suerte de estimulación que invoca a Dios y da aviso a una jueza de que lo dejarán a su suerte. Todo en medio de una nevada: una clase magistral de lo que no hay que hacer en esas circunstancias.

No me gusta ser tribuna ni comentarista de la crónica roja en la montaña, ni menos ser un "general después de las batallas". Pero no hay que ser especialista para saber que se actuó mal.

Porque el video delata un estado de exaltación en que los hombres estaban fuera de sí, en un estado de psicosis aguda, un "mal trip", en la jerga de los montañistas extremos. Y en todas la acciones humanas, procedimientos concatenados, ejecuciones delicadas, perder el centro, eso que llaman aplomo, y caer en la desesperación trae el yerro mayor, que muchas veces pasa por la muerte. El montañismo y la cirugía han sido mis escuelas. Hay muchas otras.

Más allá en el análisis, Campanini no era peso muerto, no era un "saco de papas", podía gatear, y eso facilita un rescate. Y lo que es mejor, había mucho más que dos rescatistas, quienes tenían incluso energía para grabar un video del acontecer.

Y estaban apurados, no tenían tiempo para el otro, temían por sus propias vidas, por su exposición a la nevazón... Y lo reconocen abiertamente en sus dichos.

En el diario "La Nación", de Argentina, el jefe de patrullas de Socorristas de Montaña de Argentina, Armando Párraga, ahora removido de su cargo, aseguró en conferencia de prensa que "cuando llegamos a la cima del cerro (Campanini) ya estaba muerto, por lo que se priorizó la vida de los demás andinistas, quienes tenían chances de sobrevivir".

Faltó mucha potencia, saber que se puede caminar con tormenta todo el día y toda la noche, y la siguiente... Que hay que poner al compañero entre dos, y avanzar muy lentamente... En la montaña hay que tomarse el tiempo; cuando un compañero tiene una baja de energía tan grande, uno debe disminuir los tiempos y acompañarlo; lo último que se puede hacer es arrastrarlo así como se ve en el video, y menos insultarlo.

Me han tocado situaciones muy similares en la montaña, incluso peores, con un compañero enérgico bajando de noche, varias horas, y yo sin un crampón, en el mismo Aconcagua, y en muchos otros trances, pero lo sacamos adelante con calma y energía. Campanini estaba consciente, podía moverse, y también podían hacer mucho más por él. ¿Qué hace la diferencia?

El I Ching, un libro de sabiduría chino, dice que ante el peligro el cobarde se precipita y que el valiente no. Y que la escuela es entrenar y poner al frente todos nuestros miedos.

Video en http://emoltv.emol.com/?id_emol=1669


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EMOL, 22-02-09.

Italianos que sobrevivieron al Aconcagua respaldan a rescatistas argentinos.

Los andinistas descartaron que haya habido alguna negligencia en el rescate en el que falleció el guía argentino Federico Campanini.

BUENOS AIRES.- Dos sobrevivientes de un trágico ascenso grupal al Aconcagua en enero, en el que murieron una andinista italiana y el guía argentino, respaldaron a los rescatistas que los salvaron y luego fueron cuestionados por su desempeño, según declaraciones publicadas hoy.

El episodio ocurrió entre el 6 y el 8 de enero pasado, cuando cuatro deportistas italianos y el guía fueron sorprendidos por una tormenta tras hacer cumbre en la mayor altura de América (6.959 metros) y se perdieron.

Después de pasar dos días a 25 grados bajo cero, la ayuda llegó, pero Elena Senin, de 38 años, ya había muerto.

El rescate, que movilizó a más de 50 personas, casi todas voluntarias, demandó localizar a los sobrevivientes, llevarlos nuevamente a la cumbre y descender por la ruta original. Eso salvó a los tres italianos pero fracasó para el guía, Federico Campanini, de 31 años.

La polémica se desató la semana pasada, cuando la familia del guía recibió una filmación de dos minutos en la que se lo ve ya sin fuerza para andar, con seis rescatistas exhaustos que poco lo ayudan, y que ahora son investigados por presunto "abandono de persona".

"Sí, lo vi (el video). Angustioso. Creo que los rescatistas argentinos hicieron todo lo que pudieron. Más era imposible. Federico estaba muy mal, no caminaba", afirmó Matteo Refrigerato, de 35 años, uno de los sobrevivientes, entrevistado por el diario "Clarín" en Italia.

Refrigerato asegura que no vio "ningún tipo de negligencia". "Los socorristas fueron profesionales, personas de alto nivel personal y humano, cálidos con nosotros. Los vi abrazarse y gritar, felices de habernos salvado", agregó.

Otro rescatado, Mirko Affasio, de 36 años, tuvo una opinión parecida en una reciente entrevista con el diario "Secolo XIX", de Génova.

La tercera sobreviviente fue Marina Attanasio, de 38 años. Una quinta integrante, Antonella Targa, de 50 años, se sintió mal en el ascenso y Campanini la mandó de regreso con un guía auxiliar.

Cinco personas han perdido la vida desde que a mediados de noviembre de 2008 comenzó la temporada de ascenso al Aconcagua.

jueves, 19 de febrero de 2009

El deporte ayuda a la evolución psicofísica.

Pocas actividades potencian el desarrollo de los seres humanos como el deporte. La actividad física enseña a tomar plena conciencia del cuerpo, y permite tener el control sobre éste y la mente.

DR. MAURICIO PURTO.

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El deporte es salud, y, por tanto, la consigna de estas líneas. Y también una escuela. Porque el deporte es cultura.

Como escuela, la práctica deportiva sistemática enseña a tomar plena conciencia del cuerpo, y control sobre éste y la mente. En este camino, el deportista aprende a ser dueño de sí mismo. A moldear con su mente con su voluntad, en fin con su conciencia, su cuerpo, y su intento para traer lo imposible a lo posible.

Esto es algo que queda de manifiesto en la evolución de los discapacitados que tienen la valentía de insertarse en el mundo de lo cotidiano, o se atreven en la práctica deportiva. Para ellos, el entrenamiento para capacitarse es más una necesidad de pertenencia. Un entrenamiento para lo "normal" o "fácil".

En el entrenamiento deportivo subyace esta misma esencia humana de superación, esa luz, ese espíritu, que hace del deporte una aventura del alma, de los límites. De miedos y superaciones, de crisis y éxtasis, de fracasos y glorias, donde más allá del ego se vislumbra al superhombre que busca, por decirlo fácilmente, a Dios.

Vencer los miedos, en cualquier ámbito, es el camino a la libertad. El antídoto del miedo es la fe, la confianza, y la pasión. En el camino ayudan los maestros, los que nos apartan del camino que nos vampirizará, que nos dejará sin energías, para el despertar.

Los maestros que nos enseñan sin menoscabarnos, sin hacernos sentir cobardes o ineptos, sin crearnos complejos de superioridad o inferioridad. Maestros que harán lo difícil, fácil. Aquellos que nos enseñan el camino del imposible, a jugar al azar... Más allá de los miedos, aguarda la seguridad del triunfo, que puede envanecernos y matarnos. Si no, pregúnteles a muchos héroes fugaces, por qué duraron tan poco, por qué fueron número 1 sin ganar ningún Grand Slam...

Más allá de la seguridad, cuando sabemos que tiene límites, está el poder, el cielo o el infierno. Un poder que corrompe si no somos dueños de nosotros mismos. El camino del guerrero, del deportista total.

Una escuela del cuerpo y del alma, que muchos desdeñan en el clímax de la gloria. Una escuela que en unos pocos, poderosos, amables y luminosos perdurará hasta que este campeón sucumba al único enemigo invencible. La vejez y la muerte.

Adiestrarse en el juego, moldeando un conjunto de gestos físicos sostenidos en el tiempo, es la forma que toma el proceso. Es la forma que ha tomado desde que nuestro ancestro bajó de los árboles, pudo erguirse, y caminar en dos pies, pudo liberar sus manos, oponer sus pulgares a los otros dedos, y entrenar la pinza. En fin, pudo -con pura voluntad o intento- tomar el mundo con sus manos, manos que todo el tiempo retroalimentaron su creciente cerebro a través del tacto y de los ojos... El cuerpo y la mente evolucionando recíprocamente, en grandes y pequeños pasos, en mutaciones visibles e invisibles: detalles que hacen la diferencia entre un hombre deportista y uno sedentario, entre la salud y la enfermedad. Entre la inconsciencia y la conciencia.

martes, 17 de febrero de 2009

"El hombre se ha vuelto invisible".

Revista Ya., EM., 17-02-09.

Boris Cyrulnik y su visión de la pareja moderna.

Por María Cristina Jurado. Ilustración Alfredo Cáceres.

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Una silenciosa revolución avanza. Es el fin del matrimonio clásico y el nacimiento de una pareja distinta, donde el hombre se ha vuelto invisible y la mujer, poderosa. La tecnología es la gran responsable. Lo dice el padre de la resiliencia moderna, Boris Cyrulnik. Desde Francia, nos habló de su nuevo ensayo, best seller en Europa.

Su último libro, "La Autobiografía de un Espantapájaros", se ha convertido en el best seller del invierno en Europa y ganó el Premio Renaudot de Ensayo en Francia. Es el texto número 18 en la larga y mediática carrera del psicólogo, psiquiatra, neurocirujano y etólogo francés Boris Cyrulnik. Encumbrado en todo el mundo por sus investigaciones sobre resiliencia - la capacidad de un ser humano para levantarse de las cenizas después de un golpe demoledor- , este científico, salvado del genocidio nazi y huérfano desde los seis años, observa el entorno social con ojo crítico. Su atinada y esperanzada palabra se ha convertido en ley para la mayoría de sus pares incluso en su cartesiano país de origen. Como miembro de veinte sociedades de sabios internacionales, Boris Cyrulnik contribuye al mundo desde su estudiosa mirada.

En su último ensayo - dice desde Toulon, en el sur de Francia, ciudad donde dirige investigaciones científicas y enseña etología humana- , se ha centrado en el poder de la palabra y del discurso para cambiar el destino de los que sufren, de los que parten tarde y mal en la vida. "Y eso nos lleva, indefectiblemente, al rol que cada uno está cumpliendo en este inicio de milenio. Hombres, mujeres y niños que hoy viven una existencia absolutamente distinta a la de una generación atrás. En sólo treinta años, se ha generado una sociedad nueva con relaciones personales revolucionarias".

Cyrulnik, a veces también criticado por su insistencia en una visión multidisciplinaria - es psicoanalista además- , no usa atajos para describir el muy disminuido papel del hombre de hoy en este nuevo escenario. Ni la condena sin remedio que sufre la pareja tradicional. "En todas las épocas históricas de hambruna, de guerra, dificultades materiales, de carencias y crisis, la pareja, tal como la hemos conocido, fue el fundamento de la sociedad. Porque ¿qué hacía una mujer sola si no se casaba en el siglo diecisiete o diecinueve? Se moría de hambre. Aun en mi infancia, en los años cuarenta, el único destino de las obreras era la mal pagada fábrica, en condiciones atroces. Yo escuchaba 'Lo único que quiero es casarme para dejar esta pobreza'. Se casaban y aseguraban su futuro".

El científico ha estudiado el tema en decenas de países de América, Asia y África, a donde ha sido llamado como investigador y panelista. Y ha observado que, todavía hoy, en una nación pobre y de débil tecnología, el matrimonio sigue siendo el gran valor para la sobrevida femenina. "Hasta el siglo diecinueve, la esperanza de vida de una mujer no superaba los 40 años. Como el hombre vivía en promedio hasta los 55, tener un hijo era para ella una jubilación asegurada. Mientras más niños tuviera, mejor aspectado estaba su futuro económico".

- Esto ha cambiado radicalmente, ¿no?

- Ha sido el gran cambio que ha sufrido la sociedad en apenas una generación, no más de veinte o treinta años. Cuando la tecnología progresa al extremo que hoy se ve en el mundo desarrollado, la mujer decide su propia fecundidad, es capaz de hacer cualquier oficio y profesión y acumula diplomas. El factor social ya no está dado por el cuerpo ni la fuerza física como antes - territorios masculinos- , sino por la capacidad de manipular los botones de una máquina y de usar la mente. En el mundo actual, que un hombre trabaje el campo o baje a una mina es mucho menos influyente que una mujer doctorada en lenguas.

Vivimos una nueva condición femenina, que borró las milenarias ataduras de la mujer al matrimonio, como condición de adaptación para sobrevivir. Pero, advierte el investigador, si el matrimonio va en caída libre, la pareja se agarra del abismo con dientes y muelas para no morir. Y permanece. Sin embargo, las razones para emparejarse en el año 2009 son muy distintas a las de milenios anteriores. Compañerismo, afectividad, búsqueda de seguridad sicológica y goce sexual serían las nuevas metas de hombres y mujeres hoy. Ya no es más la dependencia, sepultada bajo el progreso.

Ese hombre transparente.

Si la destreza del cuerpo y la fuerza física fueron las armas de supremacía masculina durante milenios, el vientre femenino era su equivalente. Los hombres se batían en la guerra, dominaban a los animales, araban la tierra, explotaban las canteras y levantaban pirámides. Las mujeres tenían hijos: cada uno iba armando la sociedad con su sexo y su cuerpo. Hoy, ese esquema ha sido reemplazado por las máquinas que la tecnología creó. Y el cambio producido es tal que, en este torrente de mutaciones, el hombre se ha vuelto transparente, asegura Boris Cyrulnik. "No sólo eso. También la función del padre está diluida, borrada. La necesidad de un papá casi ha desaparecido: las mujeres de hoy pueden ser –y son– padres y madres, logran darle seguridad al niño, disciplinarlo y mantenerlo financieramente. Es común observar en los países desarrollados a parejas que se juntan, viven tres, cuatro o cinco años y después se separan. Ellas se van detrás de un ascenso en el trabajo y, a veces, embarazadas. Tienen solas al niño y mantienen amistad con el padre. Para todos es normal".

- Usted dice que el hombre actual se ha vuelto inútil.

- El cuerpo de un hombre ya no sirve para nada, porque las mujeres deciden cuándo quieren ser fecundadas. Ellas tienen la palabra en sus vidas, porque hoy la manipulación de los botones que la alta tecnología les concedió, las hace completamente autónomas. Esta autonomía se vive por primera vez en la historia humana y es una revolución.

- ¿Y también cambió el sexo?

- Desde luego. Hace apenas una generación, las camisas de dormir femeninas tenían un ojal abajo, para conseguir la fecundación sin mostrar el cuerpo. Cientos de pacientes me contaron que el placer sexual las sorprendió con vergüenza. Por eso, hasta hace no más de 40 años, entre el 80 y el 90% de las mujeres eran frígidas. Para ellas, la sexualidad representaba una dominación del Estado y de sus maridos. Hoy las cifras de los institutos de sexología revelan máximo entre un 10 y un 20% de frigidez.

- Los embarazos eran útiles para sobrevivir, pero el gran freno personal...

- Un freno enorme, porque las mujeres cumplían su rol social a través de sus cuerpos. Hoy, en este nuevo contexto tecnológico, un embarazo representa salud: se ha comprobado que es un factor de protección frente al cáncer y al reumatismo.

- ¿Y qué pasa con los niños bajo este nuevo esquema?

- Los padres de antes eran sexualizados morfológicamente, los hombres decidían todo en la armada, la fábrica, la mina, el campo. Los roles parentales hoy ya no están conectados al sexo, porque las mujeres hacen lo mismo que los hombres y, a veces, mejor. Los modelos de identificación de los niños se han transformado dramáticamente.

En sociedades menos tecnológicas como América Latina, Asia y África, el cambio es menos radical. Boris Cyrulnik ha estudiado en profundidad el caso africano, donde la tecnología comienza recién a marcar presencia global. El dominio de la fecundidad, la toma en mano de su propio destino y la aplicación de modernismos en la vida diaria son pan reciente en el menú de vida de las africanas. Las estadísticas indican que, en pocos años, el progreso de la condición femenina está creciendo, mientras el hombre comienza lentamente a diluirse. Igual que en Europa y Estados Unidos.

- ¿Y en América Latina?

- Ustedes y Argentina tienen una Presidenta. Los nuevos roles son inevitables, pero en América Latina el camino será distinto, porque son sociedades diferentes. Y aunque los países latinoamericanos presenten realidades más machistas, no hay que olvidar que fue en Puerto Rico donde primero se legalizó la píldora anticonceptiva. Creo que ningún continente se quedará afuera de esta importante modificación en nuestra manera de vivir juntos.

La otra cara del cuento.

El profesor Cyrulnik fue convocado en 2007 para formar parte de los 43 expertos que integraron la Comisión Attali, creada por Nicholas Sarkozy. Destinada a elaborar una lista de sugerencias para despejar el crecimiento económico de Francia, sus miembros entregaron un sólido informe el 23 de enero de 2008. Entre las proposiciones más relevantes, desde la óptica de este padre de la resiliencia, están el dar énfasis al cuidado de la primera infancia y a la necesidad de crear "una nueva adolescencia", una que reemplace la obsoleta - en donde el padre era amo y señor- y que otorgue a los jóvenes seguridad.

- Creo que el desarrollo de la neurociencia modificará la condición de los seres humanos, sobre todo de las mujeres. Es sólo cosa de recordar que ellas mueren hoy mucho más tarde que los hombres, al revés de tiempos antiguos.

Pero tanto progreso y revolución, también tiene su cara peligrosa. La Organización Mundial de la Salud, para la cual Boris Cyrulnik ha trabajado, está demostrando con cifras que, aunque las sociedades altamente tecnologizadas producen mujeres más autónomas, éstas arriesgan mayor vulnerabilidad y sufrimiento. Porque en una sociedad más eficaz, hay menos solidaridad. Y este elemento es la llave para el bienestar sicológico en caso de catástrofe personal.

- La tecnología disminuye la solidaridad. Por eso, en naciones más pobres o menos adelantadas, como Marruecos o Argelia, no hay gente en la calle ni enfermos abandonados. En cambio, en países como Finlandia o Suecia, donde hay alta protección del Estado, los niños se crían bien, pero se sienten muy solos en la adolescencia. Y las tasas de suicidio se disparan.

Esta paradoja representa la cara amarga del progreso social. Será necesario, determinan los expertos, aplicarse a crear un lazo solidario.

- Hay que tomar conciencia de que el progreso tecnológico es útil, pero conlleva responsabilidades. Tenemos que aplicarnos para desarrollar la solidaridad familiar, ciudadana y de barrio o pagaremos un precio muy alto en vulnerabilidad. Los países no tienen aún esta conciencia, porque estos son trabajos muy recientes de la OMS.

- ¿Empezar por el living de la casa?

- Desde luego. Cuando yo era niño, inventábamos el modo de pasar la velada: tocábamos piano, cantábamos, mi mamá recitaba, se encendía un fuego. Hoy, la pareja está dividida por el computador - los hombres, sobre todo, se han vuelto fanáticos, descuidando la conversación- y en los hogares de los países ricos hay un televisor en cada pieza.

Internet, la blackberry, el cable, el skype, el celular, provocan un doloroso aislamiento. Y terminamos, dicen las cifras, en depresión o en cifras asombrosas como las recordadas por Cyrulnik: un 40% de las alemanas con profesión universitaria se esterilizan hoy para no tener hijos.

Empezar por la casa, y hoy mismo, parece ser el camino correcto.

viernes, 13 de febrero de 2009

Las emociones de la piel.


Martes 10 de febrero de 2009.

Sentir rabia, alegría o pena, no sólo tiene repercusiones a nivel emocional. También los órganos internos y externos, reciben de alguna forma las consecuencias, por lo que mantener las emociones equilibradas es igualmente una forma de mantener sana la piel.

Carolina López.

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De acuerdo a la reflexología, las emociones se pueden notar claramente en el rostro. Por ejemplo, postula que el miedo congestiona la frente, la alegría ilumina y el enojo aumenta las arrugas.

Para el psiquiatra y profesor de la Universidad de Chile, Pedro Retamal, la influencia de las emociones en la piel tiene una explicación científica: "El sistema nervioso central tiene conexiones con todo el resto del organismo", comenta. "Está en permanente intercambio con el medioambiente. Eso puede desencadenar cambios, normales o patológicos, en distintos lugares del organismo". Y eso no excluye a la piel.

Lo que pasa es que la piel tiene funciones de barrera protectora y termorregulación. Sus células liberan sustancias que, junto a las hormonas, se pueden considerar parte de la aparición de problemas como la psoriasis, ladermatitis, la rosácea o el acné.

"La piel recibe estímulos desde el sistema nervioso, que llegan por vía de los nervios sensoriales", explica el dermatólogo de la Universidad de Chile, Juan Honeyman.

Pieles tristes.

Cuando a la piel le faltan oligoelementos, o vitaminas, pierde color y luminosidad. Cuando está acostumbrada a vivir bajo estrés, tiende a acumular impurezas y a ser propensa a los radicales libres. Cuando no recibe suficientes nutrientes, se seca y aparecen manchas y arrugas. El psiquiatra de la Clínica Alemana, Guillermo Gabler, explica que el estrés desencadena reacciones inflamatorias: "Afecta al sistema inmunitario, al sistema nervioso central y a la piel".

Pieles felices.

La alegría quita la sensación de tener el rostro contraído. Alisa, relaja los músculos, entrega luminosidad. Por lo mismo, el ejercicio es una excelente manera de mantener la piel feliz. El psiquiatra Retamal asegura que realizar treinta minutos de actividad física moderada, todos los días, contribuye a mejorar la salud del cuerpo, tiene efectos antidepresivos y libera BDNF, una sustancia que estimula el funcionamiento del cerebro y es la base de la estabilidad emocional.ya

La filosofía de la facioterapia.

"La facioterapia, o reflexología facial, funciona bajo la premisa de que los sistemas emocionales se pueden equilibrar a través de la estimulación de diferentes puntos del rostro. Considera que, por medio de la piel, es posible influir en distintos sistemas del cuerpo, entre ellos, el nervioso y el circulatorio. Como el efecto sobre el sistema nervioso sería inmediato, la reflexología lo primero que produce es un profundo estado de relajación.

martes, 10 de febrero de 2009

Marihuana y salud.


EM, Deporte y salud, 09-02-09.
Por el Dr. Mauricio Purto.

Más allá del tema valórico, es una contradicción sancionar la marihuana como dopaje, porque nadie hace trampa consumiendo una sustancia que debilita el rendimiento deportivo. Está suficientemente demostrado que la marihuana no aumenta el rendimiento deportivo. Por el contrario, lo limita.

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La foto de Michael Phelps fumando marihuana golpeó al ambiente deportivo y extradeportivo mundial. Un superatleta consumiendo psicotrópicos, un escándalo al punto de cuestionar la legitimidad de sus logros.

El Comité Olímpico Internacional incluye la marihuana en su lista de sustancias prohibidas, pero en esto hay una gran contradicción. Primero, la definición de dopaje: "Es la administración o el uso, por un atleta en competencia, de cualquier sustancia extraña al cuerpo, o cualquier sustancia fisiológica tomada en cantidad anormal o por una ruta anormal de entrada en el cuerpo, con la intención de aumentar de una manera artificial y dolosa el rendimiento en competición".

Esta definición apunta a la trampa química. Es decir, una sustancia que pretende dar la ansiada diferencia sobre los rivales. Como los pesistas, que aumentan su masa muscular con esteroides anabólicos; o los ciclistas, que se estimulan con derivados de la anfetamina; o los tiradores y el propanolol para bajar sus latidos cardíacos y estabilizar el pulso.

Sin embargo, la marihuana no aumenta el rendimiento deportivo. Muy por el contrario. El consumo de Delta-9 tetrahidrocanabinol, un alcohol y sus derivados, que son sus principios activos, pueden producir decaimiento de la velocidad de reacción, de la coordinación motora y de los reflejos, con trastornos de la percepción y vigilancia, en un estado de sedación y elación. Se pueden registrar también fallas en la memoria de corto plazo y alteraciones en la percepción del tiempo. En cuanto al ejercicio, hay una reducción del rendimiento máximo, con un prematuro arribo al consumo máximo de oxígeno, sin trastornos en el volumen de aire movilizado desde y hacia los pulmones o de la presión arterial.

El consumo de marihuana induce procesos antagónicos a la actividad deportiva, y es muy contraproducente en las altas competencias. Entonces, no hay trampa implícita, no hay dolo. Ergo: no es dopaje.

Emblemático es el caso del tablista, también norteamericano, oro en los Juegos Olímpicos de Invierno en Nagano, y que dio luego positivo por marihuana. El esquiador y su equipo arguyeron que sí fumó marihuana en una fiesta, uso recreacional, y no para rendir más, que su uso es peligroso para un descenso en tabla. Tras dilucidar, la medalla le fue restituida, sentando un precedente en el sentido de que el dopaje debe sancionar la trampa y no las conductas individuales o sociales.

Lo más probable es que ese y otros deportistas, como Phelps, consuman marihuana en una faceta recreacional. Si lo hicieron antes de la competencia, serían estúpidos superhombres. Estúpidos, por consumir algo que fehacientemente los perjudica en su rendimiento (y, en este caso, merecería una sanción de su propia federación); superhombres, porque a pesar de todo, ganaron. Pero en todo caso, y más allá de esta última y muy improbable suposición, estos campeones olímpicos no incurrieron en dopaje, como ningún consumidor de marihuana...

Y ese es un problema de ellos con su equipo médico o su psiquiatra, si es que acusan problemas.

Muchos deportistas consumen marihuana. Por cierto, no con el objetivo de ganar, sino que en una faceta "recreacional", como Phelps. Generalmente, si la competencia es inmediata o mediata, los exámenes delatarán su presencia o la de derivados, e igual serán vulnerables a sanciones por dopaje. Por lo mismo, en este consumo extradeportivo no hay fraude o engaño, porque no se está buscando una diferencia a favor; y la sanción podrá ser valórica, porque no es congruente con la vida de un atleta, pero no tendría que ser deportiva, pues no violenta el principio que funda el reglamento del COI.

En los Juegos Olímpicos de Roma de 1960, la muerte del ciclista danés Kurt Enemar Jensen conmovió al ambiente olímpico. Jensen y dos compañeros habían tomado anfetaminas y Roniacol para mejorar su rendimiento en la carrera de cien kilómetros. Ahí partió el control de dopaje, para sancionar la trampa y proteger al deportista...

El tema es delicado porque muchas conductas van contra la ergogenicidad de una vida deportiva, tales como fumar tabaco, beber alcohol, consumir estimulantes o fumar marihuana. Según eso, la lista de dopaje sería infinita.

Estudio desmiente que el consumo de huevos eleve el colesterol.


Martes 10 de Febrero de 2009.
Fuente :EFE.

Londres.- Un estudio británico divulgado hoy desmiente la creencia popular de que el consumo de huevos provoque un aumento excesivo del colesterol e incida en el riesgo de infarto.

El trabajo de dos expertos de la universidad de Surrey (sureste inglés) confirma lo que estudios anteriores habían establecido, que lo verdaderamente peligroso para el colesterol son las grasas saturadas.

La creencia popular de que los huevos incrementan el nivel de colesterol en la sangre se ha fundamentado en el hecho de que la yema tiene más concentración de ese componente que ningún otro alimento.

Casi un 45 por ciento de los británicos cree que deberían comerse un máximo de tres huevos a la semana para prevenir riesgos para la salud.

Sin embargo, el estudio de la nutricionista de salud pública Juliet Gray y de Bruce Griffin, profesor de nutrición metabólica de la universidad inglesa, concluye que el colesterol en los huevos sólo tiene un efecto pequeño y clínicamente insignificante en el colesterol de la sangre.

En su estudio, los expertos constataron que, aunque, efectivamente, un colesterol alto aumente el riesgo de infartos, sólo un tercio del colesterol sanguíneo se origina en la dieta.

Otros factores que influyen son el fumar, la falta de ejercicio físico o el sobrepeso, que inciden en la grasa en la sangre y en los niveles de colesterol y, en última instancia, aumentan el riesgo de infarto.

Los expertos enfatizan que son las grasas saturadas, y no el colesterol hallado en alimentos como los huevos, las que inciden en los niveles de colesterol “dietético.”

"El arraigado error que vincula el consumo de huevos a un alto colesterol en la sangre debe corregirse,” afirmó Griffin.

El experto explicó que “la cantidad de grasas saturadas en la dieta ejercen un efecto en el colesterol sanguíneo que es varias veces mayor que la relativamente pequeña cantidad que hay de colesterol de origen dietético.”

El profesor señaló que “el público no debe limitar el número de huevos que consume.

"Pueden ser alentados a incluirlos en una dieta sana, ya que son uno de los alimentos naturales más altamente nutritivos,” añadió.

La Fundación británica del corazón ha suprimido su recomendación de limitar el consumo semanal a tres o cuatro huevos, mientras que la Agencia de Estándares Alimentarios del Gobierno apunta que la mayoría de la gente con una dieta sana no debe restringir su consumo.

lunes, 9 de febrero de 2009

La vida ejemplar de una bipolar.


Revista Mujer, La Tercera, domingo 08-02-09.

Tenía 38 años cuando los médicos le dijeron que sufría de una enfermedad. Ya pasaron 20 años desde entonces y Susana Rodríguez quiso contarle al mundo que es posible hacer una vida normal siendo bipolar. Hace poco publicó sus vivencias y un siquiatra experto recomienda leerlas, porque son claves para sobrellevar el diagnóstico.

Por Verónica Marinao.

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"Aun loco hay que seguirle el juego", dice Susana Rodríguez (58), autora del libro Bipolares ¿Apocados u Optimistas? Ella es una ex profesora de ballet y ex conductora de televisión en Antofagasta y hace 20 años fue diagnosticada como bipolar. No dice "loco" en tono despectivo, porque ella ha aprendido que la locura no es un estado permanente y que, aunque no es contagiosa, nadie está libre. En su texto cuenta pasajes interesantes que relatan cómo es mejor seguirle la corriente a un enfermo: "Recuerdo en una crisis haber creído que hablaría inglés para siempre. Ridículo, ¿verdad? Qué más da. Nadie me trató de convencer de que eso no podía ser y alguien de mi familia hasta me respondió en ese idioma para complacerme", dice.

En otro párrafo refleja una más de sus experiencias particulares: "Una vez me obsesioné con la naturaleza. Según mi locura (de ese momento), podía alimentarme sólo a través de la respiración. Mi descontrolada siquis me convencía de que Dios me mantendría a través de ésta. Entonces mi hijo, de 14 años en esa época, me daba comida como si fuera una niña. Me decía: ‘Mamá, usted dice que Dios la alimenta con su oxígeno, con naturaleza. Bueno, esto es naturaleza’, y él me iba enumerando los alimentos. ‘¿Ve? Todo es naturaleza’, me insistía. Sencillamente, su amor permitió alimentarme", escribe en su libro esta mujer a quien le sorprende que hoy esté "de moda" decir que "tal persona es bipolar", sin conocer verdaderamente de qué trata esta enfermedad.

La autora del escrito cuenta que ha ayudado a gente (bipolar) que la llama para decirle que se va suicidar. "Les digo que me esperen, y me ha pasado que he llegado al lugar y veo que los familiares dicen: ‘Otra vez lo mismo’, y echan garabatos. Lo que no entienden es que esa persona está en otra y no necesita de ese enojo", enseña Susana. Por eso, es vital que los familiares investiguen bien acerca de esta enfermedad que antiguamente se conocía como enfermedad maniaco-depresiva. Ser bipolar significa que quienes la padecen, oscilan entre dos polos. Uno es la exaltación eufórica y durante esta fase, pueden no necesitar dormir en varios días; o gastar altas sumas de dinero en cosas que no comprarían en un estado normal; o bien, caer en delirios; o ponerse irritables, beligerantes y desarrollar ideas de grandeza. El otro polo es la tristeza patológica: aquí, les puede costar expresar y sentir emociones, y también ser invadidos por pensamientos suicidas. Claro que así como existen esos dos extremos, los bipolares pueden pasar también períodos de ánimo normal o eutimia.

Cualquiera de los tres estados tiene una duración variable: pueden extenderse por días, meses e, incluso, años. Lo importante es que mientras se prolongue esa fase, la familia del paciente debe estar fuerte. "Ésta tiene que defenderse de los comentarios y de la discriminación y aprender argumentos médicos, científicos y culturales. En ese sentido ayuda muchísimo saber que alrededor del 30% de los grandes genios de la cultura universal -Van Gogh, Picasso, Schuman, Tchaikovsky y Hemingway- han sufrido esta enfermedad", dice el reconocido siquiatra Pedro Retamal, especialista en el tema, profesor asociado de la Facultad de Medicina de la Universidad de Chile y autor del libro Enfermedad Bipolar, entre otros más.

Susana ha pasado por períodos de euforia y el haber contado con el apoyo incondicional de su familia ha sido clave en esos instantes. Ella ha llegado a regalar impulsivamente cosas valiosas y no ha faltado la mano inescrupulosa que ha recibido gustosa los obsequios. Pero tanto su marido como sus hijos han estado dispuestos hacer la fuerza económica, ya que la bipolaridad es cara de costear.

Aunque en Chile existen libros de autoayuda sobre el tema, el de Susana Rodríguez es el primero escrito en primera persona. Tiene, entre muchos otros méritos, el de explicitar que alguien con este diagnóstico puede hacer una vida normal si sigue un tratamiento siquiátrico y farmacológico correcto, y si toma conciencia real de su enfermedad. Es decir, si acepta que existen peligros (como el suicidio) si abandona los medicamentos, por ejemplo. El mismo doctor Retamal leyó el texto de Susana, y sólo tiene elogios para sus páginas. "Lo recomiendo para los pacientes, para sus familiares y amigos. Van a poder entender cosas que pueden resultar incomprensibles y raras. (...) Ella le muestra al resto de los bipolares que, con un tratamiento, se puede conseguir una recuperación considerable o total. Y todo está contado en un lenguaje simple".

El doctor está en lo cierto. Susana Rodríguez explica con metáforas sencillas su condición y entrega una lección de vida en una frase: "La bipolaridad es lo que uno quiere que llegue a ser" y con eso quiere decir que lo fundamental es tomar conciencia de que se la padece. Ella aclara ésta no implica estar siempre fuera de sí. "Nosotros estamos mal bajo estos episodios mentales que están fuera de la normalidad, pero no estamos así todos los días. Esto es igual que una gripe: todos podemos tenerla y después de que se pasa estamos sanos. Pero eso no significa que no vayamos a contraerla. Lo importante es que cuando el paciente esté sano sepa que en cualquier momento puede venir una crisis, principalmente, si no se toma los fármacos. Hay gente que dice ‘no me los he tomado en una semana solamente, así es que no importa’. Pero resulta que esa laguna queda en las neuronas y puede afectar en un mes o dos meses más (...)". Por eso explica que cuando un bipolar está estable, debe decirles a sus parientes que cuando esté mal, es mejor que lo internen. "Sólo corremos menos riesgo de suicidio, porque lamentablemente existe esa voz interna y ese impulso", dice sobre el más grave peligro asociado.

En otro lenguaje, el doctor Retamal da un marco teórico a la comparación que Susana hace entre la bipolaridad y la gripe. Y lo hace desmintiendo que la enfermedad sea necesariamente crónica. "Crónica tiene el dejo de lo persistente, de lo permanente y de lo irrecuperable, y en este tipo de enfermedad, la mayoría de los casos no son crónicos. Son fásicas, es decir, tienen episodios que se pueden repetir, y el tratamiento impide precisamente la reaparición de estos. Los minimiza y las distancia entre sí. Entonces la manifestación de los síntomas es más suave y más soportable".

Inicialmente, Susana Rodríguez fue mal diagnosticada como esquizofrénica, pero afortunadamente, meses después, otro médico enmendó el error. El siquiatra Pedro Retamal explica que esa confusión ocurría con frecuencia hace unas décadas. "En su fase de euforia, la bipolaridad puede ser tan intensa, que el paciente tiene delirios y alucinaciones. Entonces es posible que se confunda con la esquizofrenia". Pero aclara que eso va en disminución en Chile y en todo el mundo hoy en día.

Otra equivocación es confundir la bipolaridad con una depresión monopolar (estar siempre triste). "Eso ocurre porque muchos pacientes consultan en estados depresivos y a veces los estados de aceleración son tan suaves, que son difíciles de diferenciar de la alegría normal", dice Retamal. Caer en estas imprecisiones es muy peligroso para el paciente, sobre todo, si se toma en cuenta que lo primordial para tratar una depresión bipolar son los estabilizadores del ánimo (litio y ácido valproico, entre otros), y no los antidepresivos.

Desde que Susana Rodríguez tuvo el diagnóstico correcto, comenzó un periplo para conocerse a sí misma. "Yo ahora reconozco que desde guagua lloraba mucho. Si me abrazaban fuerte, por ejemplo, lloraba. Hasta los 38 años, que fue cuando se me declaró la enfermedad, fui así. No era depresiva, pero sí emotiva desmedidamente. Un atardecer, la mirada de mi marido, o que él me tomara la mano, me emocionaba. Era hasta divertido para los demás, pero para mí no había un control emocional", cuenta.

A esa edad tuvo su primera crisis. Ella cree que fue gatillada en parte por el estrés laboral, pero también por una razón afectiva que prefiere no detallar. Sólo esboza que tuvo que ver con una amiga. "Yo era una persona romántica y nostálgica. Emocionalmente nunca maduré. Era tan sensible que todo el mundo me sobreprotegía y me dejaron vivir en un mundo de idealismo mágico que no existía. Y todos esos detalles se fueron cayendo y cuando tuve que enfrentar un hecho doloroso, con la ‘madurez’ de los 38, fue muy duro. Me descoloqué y no supe decir lo que sentía y ahí caí en este estado", cuenta sobre su primera crisis que la llevó hasta la internación. "Empecé con una sicosis: yo decía que iba a salvar al mundo y para mí eso era una realidad. Pero eso es una manía, porque uno raya con algo que está fuera de la realidad. Eso en el lenguaje común se llama locura y yo, esa vez, estuve internada como 11 días. Ahí se me hizo una hipnosis con la que revisé que siempre fui sumisa y complaciente, porque tenía temor a perder a las personas y a que no me quisieran. Eso es muy humano. Yo creo no poder cambiar (mi esencia), pero hoy día creo que puedo ir continuamente podando mi árbol y eso me permite deshacerme de aquellos que me perjudican".

Susana recuerda que hace 10 años tuvo su última depresión. "Es lo más terrible que puede haber. Es algo muy doloroso y angustiante. Había una voz que me llevaba a que me suicidara y yo no hablaba, porque la voz interna me decía que no lo hiciera, y cuando eso ocurre es una orden. Por eso, yo siempre les digo a mi esposo e hijos que si algún día, ni Dios quiera, lo hago, nadie tiene que sentirse culpable porque esto no tiene una lógica. Nadie tiene que sentirse culpable porque todos conmigo han sido una maravilla, una maravilla", cuenta Susana, quien no tiene religión, pero sí mucha fe y dice que la oración la ayuda mucho.

Es importante saber también que la euforia no sólo puede terminar en delirios y en una consecuente internación. También puede dar origen a procesos creativos. En una de las últimas crisis fuertes que tuvo Susana, estuvo tres días sin dormir. Durante este tiempo pintó un cuadro con dos niños aimaras. Era una imagen que se le vino a la cabeza y no pudo parar hasta que la terminó. Su habilidad con el pincel es algo que descubrió gracias a su diagnóstico. De hecho, la tapa de su libro está ilustrada con un conjunto de varios óleos hechos por ella. "Me siento orgullosa de mi enfermedad, porque me hizo darme cuenta de lo equivocada que estaba y de lo inmadura que era emocionalmente. De que todo lo ideal que creí que existía en la vida no era así, que mis condiciones innatas eran ciertas y que tenían valor. Que no tenía por qué tener miedo a la crítica: que por no haber ido a la universidad o al Bellas Artes yo no iba a poder pintar un cuadro. Creo que sin la bipolaridad no me podría haber llegado a conocer. Para algunas personas este mal llega a ser una cojera porque lo han visto sólo como enfermedad".

Su libro ahonda en este punto: "Si pudiera cambiar algo en mí, no tendría qué. La bipolaridad me ofreció todo lo que antes no tenía. (...). Es tan bonito caminar sin percibir quién me pueda estar reparando, es tan bello no arrancar de mis sentimientos. Un mendigo me parece un amigo; un drogadicto buscando salir de aquello, me mueve a conocerlo; a un inválido o a un ciego. No los veo desvalidos. La bipolaridad me insertó en el mundo de los especiales. Qué sería de mí sin haberla conocido... Tal vez estaría pensando, como antes lo hacía, en la estética, en conocer Europa sin haberme antes conocido. No me hubiera lanzado a plasmar un árbol en una tela", escribe.

Susana es socia fundadora del Taller de Pacientes Bipolares del Hospital El Salvador. "Ahí se cuentan experiencias de ayuda mutua. Yo hago de moderadora", explica esta mujer, quien se empeña en recordarles a los pacientes que sí se pueden torcer los inconvenientes de la enfermedad. Es verdad que algunos bipolares, aun habiendo estado medicados y con tratamiento siquiátrico -eso, además de contar con una familia buena detrás- no hayan sobrevivido a la situación. Pero he ahí la insistencia de Susana respecto de tomar conciencia de lo que implica la enfermedad. Sus vivencias están disponibles en la Librería Antártica y será presentado en la Biblioteca de Santiago el 8 de abril a las 18:30 horas.

sábado, 7 de febrero de 2009

Promueven el consumo de legumbres contra la obesidad.

EM., CyT, 07-02-09.

Empresas desarrollan productos saludables en base a leguminosas.

Refrescos hechos con porotos, pasteles con harina de garbanzos o snacks producidos con lentejas son algunas de las aplicaciones que científicos y empresas alimentarias están desarrollando para incorporar las legumbres a la dieta moderna con el fin de luchar contra la obesidad en los países ricos y la desnutrición en el mundo en desarrollo.

Científicos y empresas del sector reunidos en Toronto, Canadá, con motivo del segundo Simposio sobre Salud y Alimentos de Leguminosas, resaltaron la multitud de efectos beneficiosos de las legumbres.

Peter Watts, director de Innovación de Mercados de Pulse Canada (organización que agrupa a las empresas productoras de legumbres de ese país), dijo a la agencia EFE que la idea del simposio es ayudar a diseminar dietas más saludables. "La idea es que la industria entienda los beneficios asociados con el consumo de legumbres y así poder crear mensajes que estimulen su uso".

Los expertos creen que las legumbres pueden ayudar a responder a una amplia gama de problemas, desde la desnutrición en los países en desarrollo a la nutrición excesiva, que afecta a gran parte de la población en los países desarrollados.

Las leguminosas "tienen un perfil de nutrición que lo hacen idealmente adaptado para proporcionar un elevado nivel de nutrición. Es una fuente de muchas proteínas y fibras con un índice de glicemia bajo", dijo Gordon Bacon, investigador canadiense.

A pesar de estas ventajas, su consumo en muchos países se ha reducido dramáticamente en los últimos años.

Uno de los problemas de las legumbres es que han sido asociadas con "comida de pobres". "Hay que volver a llamar la atención al consumidor, fundamentalmente al joven consumidor", dijo la doctora Carmen Asensio Vegas, del Instituto Tecnológico Agrario de Castilla y León, en España. "Hay que introducirlas en bebidas, en panes, en repostería, para que no las asimilen con un plato de sus abuelos que no tiene ningún interés".

Durante el simposio se presentarán siete estudios clínicos sobre los beneficios del consumo de legumbres para la lucha contra enfermedades gastrointestinales y cardiacas, y la obesidad.

Científicos revelan el mapa de la atracción sexual entre hombres y mujeres.

EM., CyT, 07-02-09.

No sólo la proporción del cuerpo y la forma del rostro, sino también el olor corporal e incluso la voz son armas naturales para volverse irresistible.

Los genes tienen un rol clave.

AMALIA TORRES.

Encontrar completamente sexy a una persona y no a otra no tiene ninguna relación con el azar. Al menos eso opinan los científicos, que llevan años tratando de entender cómo sucede la atracción entre dos individuos del sexo opuesto.

Así lo demuestra el reportaje "Ciencia del sex appeal" que Discovery Channel emitirá mañana y cuya premisa es clara: la atracción es un asunto biológico, donde nuestro código genético es la variable principal que nos ayuda a elegir la mejor pareja.

Y todo comienza tan sólo al mirar el rostro del ser amado: los ojos, los pómulos, la nariz, los labios. Todo influye.

Desde la antigüedad se ha postulado que una cierta proporción es necesaria para ser considerado bello, y hoy hay estudios que demuestran cómo es un rostro perfecto. Por ejemplo, la distancia horizontal de un ojo debe ser igual a la distancia que hay entre ambos. Audrey Hepburn, Greta Garbo e incluso estatuas de Nefertitis cumplen con esta ecuación.

La simetría de la cara también es clave y según concluyeron investigadores británicos en un estudio publicado en la revista científica PLoS, esto sería una forma que tiene el ser humano de buscar la mejor pareja posible, ya que los rasgos simétricos sugieren que esa persona es portadora de mejores genes y que, por lo tanto, se trata de un buen compañero para reproducirse.

De hecho, una mala nutrición en la vida fetal dejaría rastros asimétricos e imborrables en el rostro.

Pero una linda cara no es lo único que se espera al buscar pareja. Al mirar el cuerpo, los seres humanos también están evaluando condiciones reproductivas y buenos genes. Así, el hecho de que los hombres se fijen en el busto femenino sólo responde al primitivo hecho de saber si la mujer ya es fértil.

El sonido también es esencial. Según estudios realizados por el profesor Gordon Gallup, de la State University of NY Albany, la voz tiene un rol trascendente.

En entrevista con "El Mercurio", el profesor Gallup explica: "El sonido de la voz de una persona es un medio que entrega importante información biológica. Hemos descubierto que el sonido de la voz puede usarse para predecir la apariencia y el comportamiento de una persona".

Hormonas sensuales.

Parte de las investigaciones más llamativas de Gallup demuestran cómo el ciclo reproductivo influye en lo que se considera una voz sensual. "El sonido de la voz de la mujer cambia durante el ciclo menstrual. Cuando está ovulando, su voz es más atractiva. Esto pudo haber servido durante la evolución humana para sincronizar la inseminación con la ovulación, y así maximizar las posibilidades de reproducirse", explica.

En la misma línea, otros expertos postulan que una voz masculina grave se relaciona con una alta cantidad de testosterona en la pubertad.

Pero eso no es todo. Incluso el olor que el cuerpo secreta es un arma para atraer al sexo opuesto, según explica desde Viena la doctora Elisabeth Oberzaucher, miembro del departamento de Antropolgía del Ludwig-Boltzmann Institute for Urban Ethology : "Hemos hecho experimentos con androstenona y copulina. La primera es una feromona masculina, la segunda es una mezcla con ácidos que produce el mismo efecto de las feromonas. Cuando a las mujeres se les da a oler la androstenona, el olor les parece más atractivo cuando están ovulando. Por su parte, la copulina desencadena la testosterona en los hombres, y cuando están expuestos a este olor, pierden la habilidad de distinguir entre una mujer más o menos atractiva. Todas les parecen sexys".

Por otro lado, otros experimentos de la doctora Oberzaucher demuestran que las mujeres pueden variar su preferencia por un hombre guiadas por sus posesiones. "El nivel socioeconómico es un criterio para las mujeres, porque están buscando una pareja que pueda mantener a su descendencia. Y para poder entregar los recursos necesarios, un estatus socioeconómico alto es útil. Por su parte, los hombres muestran su estatus a través de símbolos, como el modelo del auto u otro tipo de accesorios caros". Todo muy animal.

Una voz más viril.

Según el otorrinolaringólogo Andrés Ortega, del Laboratorio de Voz de Clínica Las Condes, los chilenos tienden a perder aire al final de las frases, lo que hace que el tono se vuelva más agudo, y por lo tanto, menos atractivo.

Sin embargo, gracias a ejercicios es posible disminuir algunos tonos, e incluso hay pequeñas cirugías que permiten rejuvenecer la voz.

En TV: mañana a las 23:00 horas, Discovery Channel mostrará el documental "Ciencia del sex appeal".